Por: Óscar Sánchez | Monterrey, Nuevo León | Sábado 4 de octubre del 2017
Cuando el balón ruede de nuevo en el sintético de la Arena Monterrey habrán pasado 959 días de que cayó aquel glorioso gol de oro de Gustavo Rosales, el que le dio el Trofeo Ron Newman al Flash de Monterrey.
Ese bombazo del «Motor» Rosales, cuando transcurrían 5 minutos y 52 segundos del tiempo extra, significó el primer título al Flash de Monterrey en la Mayor Arena Soccer League, el de la temporada 2014-2015.
Caprichos del destino -y de la organización de la MASL- obligaron a que en el instante en que les entregaron el trofeo iniciara un pausa de la franquicia regia, que hoy, después de 2 años, 7 meses y 9 días, por fin llegará a su fin.
Con un plantel renovado que mezcla juventud y experiencia y un nuevo entrenador, el Flash vuelve a la carga y quiere mostrar desde hoy que quieren terminar la temporada de la misma manera que lo hicieron en la última que jugaron.
Mariano Bollella regresa a la organización para llevar las riendas del equipo, que contará con elementos ya con mucho sintético recorrido como Armando Terán, Carlos Pichardo, Diego Reynoso o Lourenco Andrade y jóvenes promesas. Además, los ex jugadores de Primera División, Lucas Ayala y Juan de Dios Ibarra se unen al mix que armó la organización.
Esta tarde el rival es el Florida Tropics, equipo plagado de jugadores brasileños, y que el sábado por la noche jugó su primer partido de la temporada y venció 8-4 a los RGV Barracudas, en Hidalgo, Texas.
Se llegó el día anhelado por todos los amantes del «indoor soccer» de la ciudad de Monterrey, la emociones están de vuelta.
