Se han dado a conocer los rivales que enfrentara la Selección Nacional en las próximas fechas FIFA y de nueva cuenta, queda claro que el negocio está por arriba del progreso futbolístico, en el mes de Septiembre el Tri enfrentara a Australia y Uzbekistán, mientras que en Octubre se medirá a sus similares de Ghana y Alemania, todos en territorio estadounidense, una vez más, nos demuestran que lo verdaderamente importante es la derrama económica que perciben por llevarse la Selección de México a jugar en Estados Unidos, en lugar de buscar mejores sinodales para poder acrecentar el pobre nivel futbolístico que ha mostrado el combinado nacional, los dueños del futbol mexicano siguen explotando a la “gallina de los huevos de oro”, y siguen utilizando la misma fórmula, llevarse al representativo mexicano al extranjero, a un ambiente favorable y contra rivales a modo, lo que da como resultado que la fortuna de los dueños se siga acrecentando mientras que nuestro futbol va en picada.
Parece ser que, todo aquel diagnostico que se hizo luego de la pésima participación que tuvo México en la pasada copa del mundo no fue más que atole con el dedo, pues la realidad es totalmente distinta a lo que salieron a manifestar, de los tópicos mas importantes a considerar era el que regresara el ascenso y el descenso en el campeonato mexicano, además de la erradicación del repechaje, también se había informado que se buscarían mejores partidos para que el Tri, incrementara su roce futbolístico con miras a obtener una destaca participación en el próximo mundial que se jugara en territorio mexicano.
Mientras que en países como Estados Unidos o Canadá a su manera se han encargado de trazar proyectos a largo plazo, con miras a potenciar sus selecciones produciendo jugadores de mayor calidad y logrando que emigren a ligas más competitivas y por lo tanto incrementen el nivel de sus selecciones sobre todo con mira en el próximo mundial, mientras tanto en México, no se tienen proyectos en concreto y lo que es aún peor, las nuevas camadas de futbolistas parece no ser mejores que las anteriores que tampoco han podido dar ese salto de calidad que tanto se anhela en nuestro balompié nacional.
En resumidas cuentas, las cosas siguen sin cambiar en nuestra federación mexicana, al contrario, es evidente el hecho, de que no se cuenta con un proyecto sólido, pues no podemos olvidar que en un inicio se había elegido a un entrenador como Diego Cocca, quien únicamente duro 129 días como técnico del tricolor, y en su lugar entro como bombero Jaime Lozano a quien solamente le dieron contrato para dirigir la Copa Oro, a la espera de ver la posibilidad de contratar a alguien más, lo cierto es que quienes toman las decisiones solamente tienen como prioridad el tema comercial sin importar la calidad del producto que están ofreciendo, queda claro que mientras los paisanos mexicanos que radican en Estados Unidos sigan consumiendo a la selección las arcas de la federación se seguirán llenando de billetes verdes y las cosas no cambiaran, inclusive no sería descabellado que dejemos de jugar como locales en el estadio Azteca y que la nueva casa de la selección sea un estadio como el de los Ángeles que alberga una gran cantidad de aficionados los cuales pagan el precio en dólares y son más consentidores.