A pesar de los grandes esfuerzos de los dirigentes mexicanos en reducir o eliminar la sanción que impuso la FIFA a la Selección tras el grito homofóbico en los partidos eliminatorios contra Honduras y Canadá, la máxima organización de futbol negó la apelación y reiteró la sanción.
Según el medio ESPN, la apelación fue rechazada y la Selección tendrá jugar dos partidos a puerta cerrada y pagar una multa de dos millones y medio de pesos.

“En relación con la sanción impuesta a la Federación Mexicana de Fútbol por la Comisión Disciplinaria de la FIFA debido a los cánticos homófobos de los aficionados mexicanos durante los partidos de clasificación para la Copa Mundial de la FIFA contra Canadá y Honduras, la Comisión de Apelación de la FIFA ha decidido confirmar la decisión de la Comisión Disciplinaria de la FIFA en su totalidad (una multa de 100.000 francos suizos y la orden de jugar sus dos próximos partidos oficiales en casa a puerta cerrada)”, declaró un portavoz de la FIFA.
La FMF esperaba la confirmación o la anulación de la sanción impuesta por la FIFA, esto para tratar de buscar una nueva locación como Nuevo León o Guadalajara para que se realicen los partidos con la afición presente.