El auto asegura que, tras las declaraciones de la víctima y los testigos, así como las pruebas periciales, hay suficientes indicios para enviar al brasileño al banquillo por agresión sexual
La Audiencia de Barcelona ha acordado enviar a juicio al futbolista Dani Alves por presuntamente agredir sexualmente a una joven en la discoteca Sutton el 30 de diciembre de 2022.
El tribunal confirma el auto que la instructora dictó al terminar la investigación y decreta la apertura del juicio al futbolista.
Después de este auto, las partes cuentan con cinco días hábiles para presentar sus escritos de calificaciones provisionales, en los que deberán argumentar si Alves debe ser absuelto o condenado y, en este caso, qué pena consideran que se les debe aplicar.
Indicios probados de agresión sexual
En un auto, la sección 21ª de la Audiencia confirma el procesamiento del exinternacional brasileño, al concluir que las declaraciones de la víctima y los testigos, así como las pruebas periciales, sustentan suficientes indicios para enviarlo a juicio por un delito de agresión sexual.
Daniel Alves se enfrenta a una condena grave tras la denuncia por presunta violación a una joven durante una fiesta en Barcelona. La chica de 22 años denunció los hechos ocurridos en la discoteca Sutton el 30 de diciembre de 2022 y el brasileño entró en prisión preventiva en enero de este año.
La titular del juzgado de instrucción número 15 de Barcelona procesó a Alves en julio, en una resolución en la que ratificó su situación de prisión preventiva en la que se encuentra tras ser detenido por los Mossos d’Esquadra acusado de violar a la joven de 23 años en el reservado de la discoteca Sutton el pasado 30 de diciembre, y le impuso una fianza de 150.000 euros para cubrir una eventual indemnización a la víctima.
El recurso de la defensa no prosperó
La defensa de Alves, que desde octubre pasado ejerce Inés Guardiola, pidió la nulidad de la causa al considerar que las filtraciones sobre la investigación habían vulnerado su presunción de inocencia, que se habían obviado de forma «interesada y torticera» los elementos que ponían en duda la denuncia de la víctima y que la juez había perdido la «neutralidad» debido al «juicio paralelo» al exfutbolista en los medios de comunicación.
«Cuando la difusión mediática lo es a gran escala, la contaminación de la investigación judicial se vuelve irremediable e irreversible, siendo la vulneración de los derechos fundamentales que asisten al investigado insubsanable», apuntaba el recurso de la defensa de Alves.
La Audiencia de Barcelona reconoce que las causas que afectan a «personajes públicos» tienen una «indudable repercusión mediática» y que en los medios se pueden verter opiniones que atenten contra la presunción de inocencia «en su vertiente extraprocesal», si bien concluye que ello no afecta al proceso judicial y precisa que la vía para resolverlo sería el ámbito de protección del derecho al honor.
En su auto, la Audiencia lamenta las filtraciones y los «juicios paralelos», pero insiste en que ello no puede comportar la nulidad de la instrucción, ya que no tienen una «incidencia directa» en el proceso judicial.